No hace mucho que la vida hizo que me tope con este artista y la verdad que me alegro mucho de que me haya pasado. Fue en el verano zero del 2013, un miércoles que llovió y todos los toques se hicieron adentro de la nave cultural. El primero en tocar y el que me quedó marcado fue él, con su banda, con su simpleza, su sentimiento profundo, su power del alma. Me acuerdo que estaba con un amigo periodista, Federico Fayad y despues de cada tema nos quedábamos mirando sin entender mucho, con esa mezcla de satisfacción y sorpresa que tango gusta. Con el paso del tiempo pude hacerme de sus discos, pude sentarme tranquilo a escucharlos, pude ponerlo en la oficina, pude hacer todo lo que hay que hacer para disfrutarlo y para que otros lo disfruten. Y no me arrepiento. Para poder describirlo creo que bastan unas pocas palabras: sentimiento, amor a la tierra y a las cosas simples, no mucho más... Es un artista que me emociona, que me hace transportarme a otros lugares, me lleva de viaje por p...