Creo que nunca he leído un libro de terror escrito acá en Mendoza y la verdad que tuve buen tino en su momento para elegir este libro. Lo vi publicado en el instagram de su autora, Julieta Carrizo y me llamó la atención desde el primer momento. Después de algunas semanas me decidí a comprarlo online, yo no soy de hacer eso, me gusta ir a las librerías o en muchos casos juntarme con los autores para hacer el intercambio, ya que somos todos de por acá. No recuerdo bien qué fue lo que pasó en este caso, el tema es que me llegó en Julio, pero lo empecé a leer en Septiembre aproximadamente.
En esta ocasión me encontré con un libro muy ameno, muy fácil de leer, con tramas entretenidas que hacían que quisiera seguir leyendo más después de cada capítulo.
La historia (o historias) que se narran nos llevan a conocer a distintas personas que por diferentes motivos terminan en un pueblo de Rusia llamado Siete Lagos. Lo bueno (para nosotros, no para ellos), es que esos motivos que los llevan son muy oscuros, historias trágicas, miserias, vergüenzas propias y ajenas, dolores muy profundos que eventualmente van a hacer que todos se crucen y tengan que descubrir por qué es que están todos ahí.
El otro gran protagonista es el pueblo en sí, su historia oscura, sus habitantes (los que están y los que estuvieron), sus casas, edificios, el clima. Todo juega en favor de ambientar esta novela para que uno nunca esté tranquilo.
Ni siquiera con el final.
Con esta reseña de final abierto espero dejarles la inquietud para que quieran involucrarse en este mundo de pesadillas.
Buenas noches.
Pueden encontrar más info de la autora en su instagram: https://www.instagram.com/lady.black.writer/
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